Quienes me conocen saben que no soy amiga de los libros de autoayuda porque pienso que son un engañabobos , además me aburren y nunca me han servido de nada, (y que nadie se sienta ofendido, si son "consumidores" frecuentes de este tipo de lecturas ) ... aún así el libro del que ahora voy a hablar creo que no puede en sentido estricto incluirse en esa categoría, es más una novela, y como ocurre con muchas de ellas, puede aclararte cosas, darte ideas o pautas, para seguir, aunque la intención supongo de la escritora, es contar una historia y entretener.
la novela llegó a mi a través de la biblioteca, estaba ojeando algunos libros, no muy segura de lo que quería llevarme a casa, cuando al tropezar con este y leer algunas de las lineas de la contraportada, me sentí inmediatamente identificada, no por la historia en si, que no se parece a la mía, sino porque a Lou, le pasaba lo que a mi y a muchas otras personas, que acumulamos en casa un montón de "trastos", sin ninguna utilidad pero por un motivo u otro, nunca encontramos el momento de tirarlos, y acaban convirtiéndose en un lastre, ocupan espacio y no nos dejan tiempo para salir a buscar otros nuevos.
No quiero daros a entender con esto, que gracias a la novela me halla desecho de todos mis " trastos", algunos están aún demasiado arraigados a mi vida y a mis armarios y no he encontrado todavía la fuerza para librarme de ellos, pero, todo se andará... mi limpieza primaveral ya ha comenzado...
Es uno de mis temas preferidos. Deshacerte de lo viejo, la ropa que hace años no pones, trastos, como tú dices, que ya no son útiles, y metafóricamente también mandar a paseo a las neuronas con malos recuerdos. Poco a poco. Primero duele, pero luego te alegras de descubrir lo nuevo y tener espacio para ello. Un beso. (Me lo apunto)
ResponderEliminarSi, lo bueno de mandar a paseo todo lo que ya no nos sirve es que hacemos espacio, no solo para añadir cosas nuevas, sino muchas veces simplemente para respirar...¡Que hace falta!. Besinos.
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